Sbarras por el mundo: Diana en Cuba…

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• ¿En qué andan los cubanos..?

Hola Primos…  ¿Cómo están..?

Como les decía, hace pocos días que volví de Cuba.

Viajamos unos cuantos integrantes de la familia y un grupo enorme de amigos y conocidos.  

Estuvimos algo más de dos semanas y verdaderamente fueron días muy intensos.

Itinerario:  Llegamos a La Habana el 29 de diciembre, estuvimos dos días y nos fuimos a la otra punta de la isla: Santiago de Cuba para estar el 1º en los festejos del 50º aniversario de la Revolución; de allí el 4 de enero fuimos a Trinidad (bella ciudad colonial, agrego foto por las dudas); luego a Santa Clara (donde está el memorial del Che); de ahí a las playas de Varadero y nuevamente a La Habana 4 días más.

Guardo imágenes y sensaciones sumamente potentes, algunas muy emocionantes que provienen de su historia como las de Santa Clara donde está el memorial del Che, otras muy atractivas que resultan del cotidiano en cualquier pueblo de la isla, donde todo es color y sonido, donde la gente trata sus temas en la calle... 



Guardo muchas impresiones diferentes y es muy difícil seleccionar qué contar...  

Para este reporte bloguero decidí hacer un recorte focalizando en un aspecto particular y curioso de la isla: el transporte... 


 
Con el grupo de gente con el que fui (entre los que había unos cuantos de la flia) optamos por un viaje de orden más social e histórico que playero (aunque también estuvimos disfrutando del mar transparente y la arena blanca, no vayan a creer, eh?), de modo que en nuestros recorridos tuvimos oportunidad de conocer algunas de las múltiples alternativas que usan los cubanos para viajar.

Para  empezar está la popular ‘guagua’ que no es más que un colectivo, pero los hay de variados tipos y estado, aquí yo les muestro uno con fuelle bastante nuevo, es un donativo de China...  

Las ‘guaguas’ se llenan de gente porque pocos en Cuba tienen auto, las que hay no alcanzan a cubrir la demanda y hay que esperarlas bastante. 

Nosotros solíamos usarlas en La Habana, cuando llegás a la parada no hay cola sólo tenés que preguntar ‘¿quién es el último?’  y todos respetan el orden; pero cuando llega el micro ¡mamita! hay que subir, eh?


A veces se baja alguno más audaz y cuando sube el último, el que bajó empuja al conjunto para poder cerrar la puerta!  

Una vez adentro, el chofer dice el clásico ‘caminando pa'trás familia que hay lugar…’  

 
Se viaja bastante apretado, pegados unos con otros, todos hablan con todos y a nosotros siempre nos querían vender algo... 


Una variante de la guagua es el ‘camello’ que es un camión pero con cuerpo de bus (no tengo foto, pero existen!).
  

También están ‘las máquinas’ que son autos viejos grandotes a los que se les agrega una fila de asientos y tienen un recorrido fijo como un micro.  

Vos lo parás y si te sirve el lugar por donde va la máquina te subís, cobra un poco más que la guagua pero llegás más rápido; pueden ir hasta 10 ó más personas en un viaje.   

También están los taxis legales y los truchos, los taxis ruteros que son como mini buses, los ‘coco-taxis’ (motos con cabinita) y las ‘bici taxis’.



  
Todos estos transportes los usa el habitante de la isla, pero también hay otros transportes más exclusivos para los turistas: los autos antiguos lujosos y los carros con caballos para pasear por La Habana Vieja.

Los cubanos en general se ríen bastante de la forma en que se las rebuscan para viajar, para recauchutar esos autos de los años 50, no hay mucho malhumor en el medio ambiente, así que está bueno subirse a esos transportes, es también una forma de conocer.   

 
Y si no, recomiendo caminar y caminar.... con cuidado por La Habana porque manejan rápido y hay pocos semáforos.... 


No sé porqué van rápido, porque en realidad en Cuba el tiempo, es diferente...  



En una oportunidad un bus que tenía que pasar a buscarnos nunca llegó y a nuestra aceleración y "absurda" desesperación (por qué tan nerviosos si estamos de vacaciones, no?) ellos nos decían: ‘ay mi madre, qué pena.... pero bueno muchacha, caballero, tranquilos no pasa nada, que están en Cuba!’


Bella Cuba...

Diana