Algún día todas las familias tendrán algo así…

Foto: Lidia Estela

diciembre 09, 2009

Qué es de la vida de... ¡Máximo Randrup..!!

Siguiendo con la sección destinada a enterarnos qué es de la vida de los primos de segunda generación, hoy le toca el turno a Máximo Randrup, hijo de Lidia Estela y Dickie, periodista, pincharrata, futbolista y...




Director Técnico de mi gran amor
(click en las imágenes para ampliarlas)



Domingo 24 de junio de 1990.  Día soleado en la ciudad de La Plata. “¿Má, a qué hora salimos para el club?”, pregunté dando por sentado que, como siempre en fines de semana, íbamos a pasar la tarde al club de tenis. “Hoy no vamos, juega Argentina”, contestó con toda seguridad. “¿Y..?”, dije sin comprender.  La verdad es que su respuesta no me convencía para nada.  “El de hoy es un partido muy importante”, afirmó cerrando la charla.  Ese día Argentina derrotó a Brasil por 1 a 0 en los octavos de final del Mundial.  Sin dudas, un partido histórico.  Ni pensaba en ver el partido y, finalmente, grité el gol de Caniggia como nunca antes había gritado.
Nueve días después, y luego de dejar en el camino a Yugoslavia por penales, se jugó la semifinal contra Italia, el local.  Cuando empezó, mi papá todavía no había llegado de jugar al tenis, como lo hacía -y hoy nuevamente lo hace- todos los martes.  Yo no lo podía creer.  Al rato entró y preguntó: “¿Cómo vamos?”.  Cuando le dije “perdemos 1 a 0”, me respondió: “Ahora se lo empatamos”.  Y así fue.  Más tarde los penales y… ¡Argentina finalista..!
El partido decisivo de la Copa del Mundo, el 8 de julio, me encontró en un club de tenis “mirando” a mi hermana que jugaba una final de dobles.  Ese día todos los allí presentes observamos Argentina vs. Alemania y el doloroso 0-1 en contra.

En esas dos semanas, de situaciones atípicas, me enamoré del fútbol.  
Aunque nunca más viví momentos semejantes, la pasión por ese deporte continuó y se fortaleció.  Nunca más mi mamá me dijo “El de hoy es un partido muy importante” ni mi papá llegó tarde a ver un partido que yo consideraba trascendental y, jamás, volví a ver una final de fútbol en un club de tenis.  Tampoco volví a ver a la Argentina derrotar a Brasil en Mundiales, ni vi que el seleccionado nacional ganara una semifinal de la Copa del Mundo y, por lo tanto, nunca más disfruté  -y sufrí-  una final mundialista con Argentina como protagonista.

El Mundial 90 hizo que me enamorara del fútbol.  A partir de ahí prácticamente toda mi vida tuvo que ver con ese deporte.  El resto de mi infancia fue alrededor de una pelota, mi adolescencia transcurrió con un sueño a cuestas (llegar a ser futbolista profesional) finalmente cumplido en 2005, y mi presente me encuentra jugando en un equipo local por amor al deporte.
A los que me conocen menos les cuento que, además de jugar al fútbol en ADIP de la liga platense, trabajo como periodista y soy ayudante docente en una materia de la facultad, entre algunas otras actividades.
Una de las novedades de mi vida en 2009 fue que creé mi propio blog (www.futbolcurioso.blogspot.com), al cual los invito a visitar y participar.  Otra es que cursé el segundo y último año del curso de Director Técnico Nacional de Fútbol y el viernes pasado, en el Salón Dorado de la Municipalidad, me entregaron el título.
En 1990 el fútbol me enamoró y, luego de ver miles de partidos con mi papá (mi mayor maestro en este deporte/pasión), 19 años más tarde me transformé en director técnico de mi gran amor.
Máximo.



6 comentarios:

Eddy Randrup dijo...

Querido Maxo: Te felicito por haberte dedicado a lo que te gusta. Me hace feliz ver el orgullo y la pasion con los cuales contas tu historia.

Un abrazo,

Eddy.

Fede dijo...

Vos si que tenes suerte...
Yo también me enamore del fútbol, mi problema es que el fútbol no se enamoro de mi.
Yo insisto, insisto, peeeero se acerca el adiós.

Anónimo dijo...

Maxi. muy buena la cronica y el recuerdo del Mundial 90. Mi sueño también fue ser futbolista profesional, pero solo llegué a ser profesional, futbolista ni por asomo.
Cuidado!! en las fotos estás cada vez más parecido a Fede

Máximo Randrup dijo...

Eddy: gracias por las felicitaciones.
Fede: sos un gran jugador, pero delantero; NO VOLANTE.
Anónimo: me alegro que te haya gustado la crónica.

Besos a todos, Maxo.-

Anónimo dijo...

Hola Maxo, me encantó leer tu presentación en la pàg.
Me encantó saber que finalmente sos DT, que -como dice Eddy- estás haciendo lo que te gusta, y también, mucho me gustó como está escrita la nota: hay un desarrollo, hay un remate final, hay feeling, dirían los jazzmen.
Es más de un cuentista que de un periodista!
Un abrazo, w

Anónimo dijo...

Hola Maxo, me encantó leer tu presentación en la pàg.
Me encantó saber que finalmente sos DT, que -como dice Eddy- estás haciendo lo que te gusta, y también, mucho me gustó como está escrita la nota: hay un desarrollo, hay un remate final, hay feeling, dirían los jazzmen.
Es más de un cuentista que de un periodista!
Un abrazo, w